El invierno comienza a finales de diciembre y termina en marzo, también tiene muchos aspectos positivos. Hay opciones de destinos maravillosos en el viejo continente para escapar del frío incluso durante esa temporada.
Echa un vistazo a los cinco mejores destinos de Europa y disfruta del invierno a tu manera.
Los 5 mejores destinos de escapada de invierno de Europa:
1. Islas Canarias
Este archipiélago formado por ocho grandes islas, cinco islotes e innumerables formaciones rocosas más pequeñas se encuentra en la costa africana, pero forma parte del territorio español.
Canarias es conocida como "la tierra de la eterna primavera", ya que las temperaturas se mantienen entre los 16 y 26 grados en todas las estaciones y, por lo tanto, son el destino favorito de los europeos para escapar del invierno.
Mi parte favorita de las Islas Canarias es que cada una tiene algo muy especial y único para visitar, como el volcán Teide en Tenerife, Las Dunas de Maspalomas, en Gran Canaria, las Tierras Rojizas en Lanzarote y las aguas cristalinas de Fuerteventura.
Además, todos cuentan con una increíble variedad de animales marinos que se pueden ver en los paseos en barco que salen diariamente de la costa.
Cualquiera que sea la isla que elijas, te puedo garantizar dos cosas: habrá muchas cosas que hacer y no pasarás frío ni un día.
2. Chipre
Este pequeño país con una fuerte herencia cultural griega se encuentra en el Mar Mediterráneo, muy cerca de Asia. Chipre, que también forma parte de la Unión Europea, es fácilmente accesible para cualquier viajero que ya se encuentre en el continente.
La única salvedad es que un tercio de esta isla está bajo el mando de la autoproclamada República Turca del Norte de Chipre, un gobierno que no está oficialmente reconocido, pero que utiliza la fuerza militar para controlar la entrada y salida de la población en esa parte del territorio. Este hecho no supone ningún peligro para los visitantes, pero es importante recordar que es imprescindible contar con pasaporte para moverse entre el norte y el sur del país.
Entre los atractivos de Chipre se encuentran sus infinitas playas paradisíacas, pueblos pintorescos, monumentos griegos y fenicios e incluso los lagos donde se enamoraron Adonis y la diosa Afrodita.
El clima invernal de la isla siempre se mantiene por encima de los 10 grados y hay al menos 300 días de sol al año.
3. Malta
Bastante popular entre los estudiantes de intercambio que buscan estudiar inglés a precios más asequibles, Malta se ha vuelto cada vez más conocida en todo el mundo y está a la altura de su fama.
El pequeño país tiene impresionantes paisajes naturales y un rico patrimonio cultural que mezcla edificios musulmanes con monumentos cristianos.
En invierno, las temperaturas suelen rondar los 10 a 15 grados, pero en algunos días pueden llegar a los 20. Lo más importante es que la ciudad sigue ocupada y con muchos atractivos al alcance de los turistas, aunque ni siquiera está cerca del bullicio del verano.
Otra gran ventaja es que las escuelas de inglés ofrecen descuentos muy atractivos y es posible combinar el estudio con el trabajo voluntario.
4. Isla de Madeira
Los portugueses dicen que la isla de Madeira es tan hermosa que fue allí donde la primavera decidió tomarse unas vacaciones de invierno. Con temperaturas que rondan los 20 grados en las cuatro estaciones y un paisaje muy florido, la región tiene tantos atractivos que hay visitantes durante todo el año y siempre dicen que les hubiera gustado quedarse más tiempo.
Madeira también es conocida por su gran oferta de senderos, que existen desde el siglo XV y ofrecen vistas increíbles desde todas las partes de la isla.
Este contacto con la naturaleza es sin duda uno de los puntos fuertes de la región, así como su incomparable gastronomía. Si decides visitar la isla de Madeira, asegúrate de probar el sabroso vino de Madeira y el pastel de miel, un dulce típico de Navidad que estará por todas partes durante el invierno.
5. Málaga
La ciudad de Málaga, ubicada en el sur de España, también es una gran opción para escapar del frío. El sol aparece, 300 días al año y las temperaturas durante el invierno varían entre 12 y 17 grados.
Si aún prefieres evitar el agua de mar en este clima, puedes aprovechar las aguas termales. Son de acceso público y gratuito, con aguas cálidas y fuertes poderes energizantes, según la población local.
Cuenta la leyenda que las tropas romanas de César se bañaban en estas aguas antes de enfrentarse a una batalla y que incluso el propio emperador se benefició de estas aguas mágicas. El camino a los manantiales es un sendero entre la naturaleza perfecta para completar esta experiencia y calentar todo el cuerpo.
