El vidrio se utiliza cada vez más en las ventanas y debido a la gran demanda es posible encontrar diferentes tipos de vidrio para ventanas y con diferentes funciones.
Además del uso convencional como ducha, por ejemplo. Se puede utilizar como parte de la estructura de la casa, segmentando cada ambiente o simplemente como objeto decorativo.
Cabe mencionar que la gran apuesta de los arquitectos es el tipo de vidrio que tiene control solar, ya que se adapta a diferentes condiciones climáticas y diferentes tipos de luz.
Lo que acaba contribuyendo a la eficiencia energética, que es uno de los grandes beneficios del material.
Tipos de vidrio para ventanas
Vidrio flotado
Vidrio flotado también conocido como vidrio ordinario es al que estamos acostumbrados. Está hecho de una mezcla de sílice (arena), potasio, alúmina, sodio, magnesio y calcio.
Es la composición más básica del vidrio, sin tratamientos específicos.
Cuando la composición líquida del vidrio se seca, se vuelve suave y rara vez se encuentran defectos.
Puede ser transparente (incoloro), verdoso y ahumado.
Este vidrio es muy utilizado en las ventanas tradicionales y su ventaja es que acaba siendo el más barato para el consumidor.
La desventaja es que no garantiza la seguridad cuando se rompen, por lo que puede que no sea la mejor opción para usar en ventanas.
Vidrio laminado
El vidrio laminado está formado por dos capas de vidrio con una película ultrafina entre ellas.
Suele estar fabricado en resina o PVB, porque cuando el vidrio se rompe, los fragmentos quedan atrapados en la película y así evitar accidentes.
La laminación de la película también ofrece control acústico, lo que puede ser una gran ventaja para quienes quieran tener un poco más de privacidad en el entorno.
Además, el vidrio laminado tiene protección contra la luz ultravioleta, brindando aún más seguridad al consumidor.
Otra de las ventajas que se encuentran en este tipo de vidrio es la parte estética, ya que tiene varios colores, lo que puede contar un punto más para quienes también quieren hacer más colorido el ambiente.
Por esta razón, es uno de los tipos de vidrio más utilizados para áreas exteriores como ventanas y balcones.
Vidrio templado
Si deseas tener un vidrio resistente, debes elegir vidrio templado sin pensarlo dos veces.
El vidrio templado es uno de los tipos de vidrio de ventana más utilizados, ya que es 5 veces más resistente que el vidrio ordinario.
Cuando el vidrio se rompe, se forman pequeños trozos en gránulos, lo que reduce la posibilidad de daños corporales o materiales.
El tratamiento del vidrio templado se realiza térmicamente y una vez realizado no se puede modificar.
Para este tipo de vidrio se pueden realizar varios cortes o detalles, pero hay que hacerlo antes del templado.
Vidrio impreso
El vidrio impreso también se conoce como "vidrio de fantasía", que permite el paso de la luz.
Sin embargo, es un tipo de vidrio que brinda visibilidad distorsionada, una ventaja para quienes desean un ambiente con privacidad.
Puede tener un acabado brillante, mate, esmaltado o texturizado.
Dependiendo de la textura, recibe diferentes nombres como mini-boreal, corrugado, estriado entre otros.
Es un vidrio traslúcido, es decir, puede tener o no un acabado por ambas caras.
Otra ventaja de este tipo de vidrio es que también se puede utilizar para componer la decoración del ambiente.
Es muy utilizado en oficinas, clínicas y lugares que requieren mayor aislamiento.
La desventaja es que suele ser un poco más caro.
Vidrio mosaico
El vidrio alambrado es muy similar al vidrio impreso translúcido.
Consiste en una especie de “mosaico” metálico que intenta sujetar el vidrio cuando se rompe.
Además, la gran ventaja del vidrio alambrado es que tiene altos niveles de resistencia al fuego, lo que es una gran ventaja para la seguridad del consumidor.
También es muy utilizado en salidas de emergencia ya que se considera una de las ventanas más resistentes del mercado.
Cabe mencionar que el mosaico dentro de la estructura de vidrio también tiene un efecto decorativo, que puede ser una buena opción para complementar el ambiente.
Vidrio aislante
El vidrio aislante es el más indicado para quienes desean más luz natural en el entorno.
Este tipo de vidrio ofrece una buena penetración de la luz, pero bloquea el calor excesivo, evitando la luz ultravioleta.
Además, tiene la capacidad de brindar control acústico, aportando mayor comodidad y privacidad al entorno en el que está instalado.
También se le puede denominar "doble acristalamiento", ya que permite combinar dos capas de vidrio idéntico o con propiedades diferentes.
Por ejemplo: Puede utilizar una capa laminada y templada en el mismo vidrio con protección solar y acústica.
